Un buen clima laboral conduce a la empresa al logro de sus objetivos, cuando es malo, origina conflictos y bajo rendimiento por parte de los colaboradores.Algunos elementos que son de importancia dentro de éste son los siguientes.
Autogestión:
Este aspecto mide el grado de la independencia que tienen las personas al ejecutar sus tareas cotidianas. Aunque la supervisión es importante no siempre se puede dar de manera constante debido a diferentes ocupaciones del supervisor, por lo que el personal debe responsabilizarse de su trabajo.
Para promover un clima laboral saludable se hace necesario que cada uno de los miembros tenga alto nivel de compromiso personal y grupal. Cuando solo algunos están comprometidos, el equipo empieza a dividirse en bandos, lo cual provoca distanciamiento.
Vínculos:
Aquí se evalúan las relaciones que tienen los colaboradores entre sí, se establece quiénes son más afines. Desfavorece que haya algún grupo que aunque trabajen juntos no se lleven bien. El trabajo en equipo se basa en una buena relación entre los miembros que lo conforman, también es fundamental el respeto, la madurez y la manera en que se comunican unos con otros.
Espacio Físico:
Es importante que el lugar de trabajo tenga buenas condiciones que permitan realizar la tarea de los colaboradores, afecta para bien o para mal la iluminación, la distribución de espacios de trabajo, el sonido, ubicación. Es un hecho que a mejores condiciones, la productividad y rendimiento de los colaboradores es mejor.
Liderazgo equitativo:
Todo buen líder debe relacionarse con su equipo, mostrar empatía y encarar cualquier situación laboral que requiera de su intervención, dando soluciones a cualquier duda o problema que plantee alguno de sus colaboradores, sin preferencias o inclinaciones hacia algún departamento en particular, el líder debe ser objetivo e inclusivo.
Organización:
Para que los objetivos sean alcanzados es preciso fijar ciertos procedimientos que definan: ¿existen metas fijadas?, ¿se integran proyectos por equipos? Es conveniente establecer modelos de gestión para evitar la ejecución de tareas a ciegas, o sólo porque en ese momento urge determinada acción, todo estará bajo control si existe un método para llevar a cabo los procesos.
Reconocimiento:
El desempeño, esfuerzo y un trabajo bien realizado debe ser reconocido, esto motiva a los colaboradores. Puede darse un reconocimiento de forma verbal, escrita o económica. Cuando el trabajo bien hecho no se reconoce, genera desmotivación, afectando así el rendimiento y productividad de quienes están dando todo por la empresa.