viernes, 21 de abril de 2017



Captar nuevos clientes siempre es un indicador éxito para las empresas y a la vez una de las diferentes formas con las que las organizaciones generan ingresos pero muchas veces por enfocarse en nuevos clientes, se tiende a descuidar a los que ya forman parte de una cartera lo cual se traduce en un problema en el mediano plazo. No se trata de restarle importancia a los clientes nuevos sino que se debe generar un balance y centrar esfuerzos en las dos vías, generar clientes nuevos y en retener a los que ya cuentan como clientes. A continuación vamos a hacer mención sobre algunos principios que son vitales.

Empatiza en lugar de vender.

Mostrar interés en los clientes es imprescindible para ganar su confianza, no es conveniente agobiarles con presentar los productos, sino brindarles una buena atención. Vender va a generar utilidades, pero las ventas pueden darse de manera indirecta al demostrarle al cliente que nos preocupamos por darle un buen servicio,  lo cual genera una conexión que va más allá de la necesidad de un producto y se convierte en un vínculo emocional.

Crea una estrategia enfocada en el cliente.

No sólo el equipo de ventas o atención al cliente es responsable de velar por la satisfacción de los clientes. Cada una de las personas que trate con él, sin importar su área, debe conocer el impacto que tiene darle una gran experiencia con respecto a la empresa. Pueden ocasionarse problemas si se desconoce la medida en la que puede afectarse la experiencia del cliente, por lo contrario puede resultar agradable y algo de lo que va a hablar.

Mantén un equipo de trabajo motivado.

Si te preocupas porque tus clientes estén siempre satisfechos, date a la tarea de cuidar también a tu equipo. No es una acción que esté controlada del todo, pero existen diversas formas en las que puedes ayudar al estado de ánimo del grupo. No necesariamente deben ser incentivos económicos, sino hacerles sentir parte importante y que gracias a ellos y a sus esfuerzos se consiguen los objetivos que a su área corresponden.

Brinda beneficios en precios.

Dar beneficios como adquirir productos a precios especiales, es una buena forma de fidelizarlos. Incluso puede hacerse aún mejor, otorgando un certificado o una tarjeta para que esta acción tenga mayor significado. ¿Cuándo hacerlo? si se dispone de información como fecha de cumpleaños, o si observamos que el cliente lleva cierto tiempo como usuario es posible tener una atención comercial, enviando una felicitación o realizar un regalo.  

Convierte un error en una oportunidad.


Todas las empresas buscan que las acciones que realicen sean con excelencia, aunque siempre existe la posibilidad de cometer errores. No debe darse por perdida la relación con un cliente que posiblemente su experiencia no haya resultado agradable, es una gran oportunidad para demostrar el compromiso que tiene la empresa para con él y recuperar la relación que se había visto afectada con anterioridad.